La acuicultura es un importante método de producción de alimentos y materias primas, y sin duda una excelente actividad productiva. Sin embargo, muchas veces ha sido criticada por emplear un uso excesivo de recursos. Uno de los desafíos que enfrenta esta actividad hoy en día es asegurar la sustentabilidad; es decir, que sea ecológicamente sustentable además de económicamente rentable, por lo que se pretende generar caminos que permitan hacer un uso racional del recurso natural. Estas actividades plantean retos que rebasan la frontera y la dimensión de lo que conocemos como regiones geográficas, razón por la cual unir esfuerzos entre naciones es un aporte considerable. La investigadora Laura López Greco comenta: "La unión de dos partes implica mucho más hacia afuera, y eso es algo que se ha estimulado bastante en la Universidad de Buenos Aires y en el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), y no cabe duda de que las relaciones que hemos hecho anteriormente con CIBNOR, muestran que el compromiso y la proyección que tiene hacia la sociedad es de calidad y excelencia."
Este programa de retroalimentación científica e intercambio de esfuerzos surge en el marco del proyecto de cooperación Argentina-México, en donde investigadores y científicos de la Universidad de Buenos Aires y del Centro de Investigaciones Biológicas ofrecen capacitaciones para transferir conocimientos en temas que involucran mejoras en los sistemas de alimentación y nutrición, así como en el uso eficiente de recursos. El propósito de este programa radica en la formación de recursos humanos y, fundamentalmente, en estrechar lazos en ambos países para generar actividades conjuntas que sean volcadas tanto en la sociedad mexicana como en la sociedad argentina.
"Estamos enfocando nuestro trabajo en cómo hacer este tipo de aproximación, en transferir conocimiento a los productores de cómo mejorar los sistemas alimentarios, reducir al mínimo los residuos y mejorar los sistemas de mantenimiento hídrico. Y por supuesto, no podemos pensar en cultivar si no pensamos en el aspecto sanitario tanto del producto como de enfermedades que puedan causar un daño ecológico importante. Estamos encaminados hacia ello; realmente todo lo que se hace en investigación tiene que ver con cumplir la meta de no solamente producir alimento, sino reducir los riesgos que la actividad conlleva." Afirma la investigadora Laura López Greco.
Fuente:Tiempo de ciencia